Cuantas veces de niños no habremos entrado en las cocinas nuestras abuelas atraídos por esos aromas tan apetecibles que emanaban de sus ollas de chisporroteantes chup, chups. Pimentón, azafrán, laurel, ajo, canela… son olores que nos recuerdan a ellas, a sus ganas de mimarnos con los mejores platos llenos de cariño y tradición.
A ellas, por su gran legado, queremos rendirles un cálido homenaje recordándolas desde nuestras cocinas con esos platos de toda la vida que nos transportan a nuestra infancia y a esos momentos entrañables compartidos con la familia y amigos.
¿Qué hay de el cocido de los Domingos? ¿Y de las alubias con morcilla? ¿Y las lentejas?
No debemos perder la costumbre de saborear esas recetas tan especiales para nosotros que cocinaban nuestras abuelas y preservar los sabores típicos de nuestra tierra.
Una buenas lentejas con arroz no pueden faltar nuestra mesa. Este típico plato español es un gran ejemplo de nuestra tradición gastronómica. Con ese clásico puñadito de arroz que se le añade desde tiempos inmemoriales es una manera perfecta de hacer esta elaboración casera aún más deliciosa, que al combinar alimentos aportan muchos más nutrientes y sensaciones.
Sabías que las lentejas con arroz es conocido como el plato de la eterna juventud por sus propiedades regenerativas. En la India es una comida esencial de los practicantes de yoga y meditación, ya que se dice que esta mezcla confiere al organismo energía duradera y equilibrio tanto físico como mental y emocional.
Otro día también puedes probar otra receta tradicional, ideal para un frío día de otoño, como es el guiso de lentejas con chorizo de toda la vida.
Tenemos motivos de sobra para preservar y enseñar a nuestros hijos estas deliciosas elaboraciones, para que sigan pasando de generación en generación, formando parte lo que somos y de nuestras buenas costumbres, en honor a nuestras queridas abuelas.
Y tú que dices, ¿continuamos con la tradición?